
Brigada militar y batallón aéreo llegan a El Paso para reforzar seguridad fronteriza bajo operativo de Trump.
Por Agencias
El Ejército estadounidense desplegó un impresionante equipo de combate en la frontera con México, con la llegada de vehículos blindados Stryker y un batallón de aviación el pasado 28 de marzo. Estos poderosos equipos se posicionaron estratégicamente en la línea divisoria entre El Paso, Texas y Ciudad Juárez, como parte de un operativo que busca frenar cruces ilegales y el tráfico de drogas. La Patrulla Fronteriza de EU celebró el despliegue en redes sociales, afirmando que “la seguridad fronteriza es seguridad nacional”.
Los Stryker M1126 son una pieza clave en esta estrategia militar: con blindaje contra armas de 14.5 mm y capacidad para 11 tripulantes, estos vehículos de ocho ruedas superan en resistencia a la infantería ligera pero son más ágiles que un tanque. Según el Pentágono, su tecnología de visión térmica y sistemas periscópicos de 360° los hace ideales para rastrear movimientos sospechosos en la extensa frontera. “Reflejan el compromiso inquebrantable de proteger nuestra soberanía”, declaró Sean Parnell, portavoz militar.
El armamento de estos vehículos no pasa desapercibido: pueden equipar ametralladoras Browning calibre .50, lanzagranadas automáticos Mk 19 y sistemas de comunicación de última generación. Su despliegue coincide con la política de mano dura del presidente Trump frente a la migración irregular y el narcotráfico. Analistas señalan que esta movilización podría cambiar el modus operandi de los cárteles, acostumbrados a operar en zonas con menor vigilancia tecnológica.
El operativo no solo incluye los Stryker: un batallón de aviación de apoyo general llegó para brindar cobertura aérea, aunque las autoridades no han detallado qué tipo de aeronaves participan. Este movimiento táctico se enmarca en la Operación Guardianes de la Libertad, que ya había enviado 5,200 soldados a la frontera en 2018. Sin embargo, es la primera vez que se despliegan vehículos de combate con esta capacidad ofensiva en la región.
Las reacciones no se han hecho esperar: mientras autoridades mexicanas guardan silencio, organizaciones civiles en ambos lados de la frontera advierten sobre la “militarización creciente” de la zona. Defensores de migrantes temen que este operativo genere más violencia contra familias vulnerables, mientras expertos en seguridad reconocen que el narcotráfico ya busca rutas alternas para evadir la nueva tecnología militar.
Este despliegue marca un antes y después en la seguridad fronteriza: con elecciones presidenciales en EU este año, el mensaje es claro. Trump apuesta a mostrar fuerza en la frontera, aunque especialistas cuestionan si los Stryker —diseñados para guerra urbana— son la solución para retos complejos como la migración humanitaria. Lo cierto es que, por ahora, la frontera más transitada del mundo luce como zona de guerra.
Datos clave:
• 8 ruedas de tracción en todo terreno
• 14.5 mm de resistencia en blindaje
• 11 soldados por unidad operativa
• 360° de visión con tecnología térmica